¿Qué es la autoestima? ¿Qué es el autoconcepto?
La autoestima es la autoevaluación global y específica, positiva o negativa, de un individuo. Por ejemplo “mis profesores piensan que soy el mejor en plástica”.
No es una entidad global y genérica, sino que están formada por diferentes áreas en las que interactúa el niño/a y de las cuales obtiene descripciones de sí mismo/a o juicios de valor.
Algunas de estas áreas serían; área escolar (el niño/a se compara los resultados académicos con el resto de la clase), área social (el niño/a valora sus relaciones sociales, así como si cumplen sus expectativas o si se siente valorado dentro del grupo de iguales), área familiar (el grado de integración en la familia y de pertenencia, así como la imagen que tienen de ellos/as), área de aspecto físico (autoevaluación de su apariencia y presencia física, así como sus competencias), área moral-ética (valorar si es correcto o no sus actuaciones, si sigue las normas o reglas prefijadas), entre otras. Según la etapa evolutiva o la importancia que cada área pueda tener para el niño/a, cada área tendrá mayor o menor peso en su autoconcepto, y por tanto en su autoestima.
La autoestima como fortaleza psicológica
La autoestima cumple una función principal en la persona, una buena autoestima es una fortaleza psicológica importante. En nuestra constante interacción con el medio, recibimos críticas negativas, fracasamos, perdemos, sufrimos, nos decepcionamos, estresamos, etc. Una buena autoestima sería la fortaleza psicológica que nos ayudaría a sobreponernos de los problemas, confiar en nuestras posibilidades y aportarnos la motivación para continuar a pesar del fracaso, seguir porque creemos en nuestras cualidades.
¿Cómo detectar que un niño/a tiene baja autoestima?
Entre las características podemos encontrar: son extremadamente críticos consigo mismos (por ej. no sirvo para nada, no me puedo equivocar nunca), son muy perfeccionistas, se autoexigen un ideal en muchas ocasiones inalcanzable, excesivo temor a equivocarse y a fracasar, muy sensibles a las críticas (ya que les afectan en demasía), necesitan el reforzamiento continuo y la aprobación por parte de los demás de forma constante. En las relaciones con los demás suelen presentar dificultades para hacer amigos, son críticos consigo mismos y con los demás, actuando de una forma en muchas ocasiones pasiva.
Claves para mejorar la autoestima en la familia
– Aceptar a su hijo/a tal como es. Demuéstrale que tienes fe en él y en sus capacidades. Esto le puede animar a esforzarse más para conseguir sus objetivos.
– No realizar comparaciones con otro miembro del núcleo familiar (por ej. los hermanos). Cada hijo/a es diferente, con cualidades y defectos.
– Evitar frases que le hagan sentirse culpable, como «Me matas a disgustos» así como etiquetas de «Malos» o «Tontos”.
– Dedicarles tiempo a cada uno/a de sus hijo/as de forma independiente.
– Cuando deba reñirse, que sea de forma específica de lo que acaba de ocurrir (por ej. “no has hecho la cama”), y evitar generalizar (por ej. “eres un desastre, nunca haces la cama”).
– Reforzar sus logros y motivarles en aquello en lo que fracasan.
– Demostrarle cariño y afecto. No castigarle sin él, perder el afecto no es un castigo adecuado, le hará dudar de él mismo y que no nos merece. Usar otros castigos (por ej., sin postre de chocolate, sin televisión, sin la playstation, sin ir al parque, etc.).
– Destacar los aspectos positivos, comunicándole tu reconocimiento cuando haga las cosas bien, en lugar de comentarle lo que está mal. Es decir, no sólo reñirle cuando lo haga mal, reforzarle cuando lo haga bien, de esta forma aumentaremos esa conducta deseada.
– Felicitarle cuando está haciendo algo que esté bien o que te guste, nada más haya terminado de realizarlo. Es importante que las consecuencias, positivas o negativas sean inmediatas.
– Permítalo que asuma responsabilidades, con tareas sencillas, y a medida que crezca, se van aumentando (por ejemplo, poner la mesa, hacer la cama, encargarse de la mascota, etc.) y reforzarle.
– Potenciar situaciones de interacción con otros niños/as (por ej. ir a parques, plazas, etc.), las relaciones sociales son una parte muy importante en la autoestima de los niños/as.
– Anímale cuando se enfrente a cuestiones que le resultan complicadas, cree en él.
– Ayúdale a comprender que cualquiera puede cometer errores y que lo importante es aprender de ellos. Ya que no siempre conllevan una consecuencia negativa.
– Organiza actividades en equipo en casa, fomentando su participación.
– Hacerles ver con acciones, no sólo con palabras, que les queremos.
– Cumplir las promesas.
Claves para mejorar la autoestima en la escuela
– Evitar las comparaciones con sus iguales.
– Favorecer el trabajo cooperativo.
– Reforzar en público y en privado.
– Evitar relacionar la valía personal con la conducta disruptiva.
– Realizar las correcciones en privado.
– Ofrecer oportunidades de éxito.
– Hacerle sentir aceptado y perteneciente a su grupo clase.
– Déjale que asuma responsabilidades, partiendo de tareas sencillas y a medida que aumente su capacidad, se va aumentando su grado de responsabilidad. Por ejemplo, coordinar un grupo, ir a por folios, repartir unas actividades, hacer recados, etc.
– Intentar enseñarle a aprender de los errores, y observar el lado positivo que es mejorar.
– Centrarse en el proceso de aprendizaje más que en la meta. Reforzarle por cada paso que finalice de forma exitosa en una misma tarea.
– Coordinarse con la familia y compartir con ella los logros y acciones por mejorar.
– Permítale que exprese su opinión y sentimientos en situaciones de conflicto o agradables, haciéndole partícipe de la toma de decisiones y reforzando su capacidad para solucionar problemas.
Enséñale a creer en sí mism@, así podrá llegar tan lejos como se lo proponga